Solo porque los niños sean inteligentes, no significa que automáticamente estén altamente motivados para aprender. De hecho, algunos de los estudiantes menos comprometidos que hemos conocido eran extremadamente brillantes, pero no podían, o no estaban dispuestos a ser productivos.

La motivación es fundamental para tener éxito en la vida. “Tener” capacidad sencillamente no es suficiente. Los niños también necesitan usar y desarrollar sus habilidades y talentos.

LOS BENEFICIOS DE LA AUTODISCIPLINA Y LA TENACIDAD

Las investigaciones muestran claramente que la motivación es importante. Un estudio realizado con estudiantes universitarios encontró que un elevado autocontrol (lo cual implica una fuerte motivación) se relaciona con mejores calificaciones, relaciones más felices, y una mejor adaptación sicológica. Otros dos estudios longitudinales, que involucraron a estudiantes de octavo grado, encontraron que la autodisciplina es un mejor indicador que el coeficiente intelectual, para predecir el rendimiento académico.

Los logros a menudo requieren una motivación sostenida en el tiempo. Ángela Duckworth, de la Universidad de Pennsylvania, utiliza el término “tenacidad” para describir la perseverancia y la pasión que se tienen por las metas a largo plazo. Quienes tienen tenacidad parecen estar encendidos internamente por un entusiasmo y determinación para alcanzar sus metas. Saben persistir, a pesar de los obstáculos o contratiempos. Su determinación no proviene de un impulso iracundo o severo, sino de un inspirado sentido de propósito adoptado a nivel personal. Duckworth insiste en que la tenacidad no es solo cuestión de intensidad en el esfuerzo, sino que también implica un esfuerzo consistente y duradero. La investigación realizada por Duckworth y sus colegas ha encontrado que la tenacidad se asocia con obtener un promedio de calificaciones más alto, un mejor puesto en el Concurso Nacional de Ortografía, pasar más años en la escuela, e incluso con durar más tiempo en la exclusiva Academia Militar de West Point. La tenacidad no está relacionada con el coeficiente intelectual, algunos niños brillantes son muy resueltos, y otros no lo son.

LA MOTIVACIÓN DE LOS NIÑOS HACIA EL TRABAJO ESCOLAR

Los niños varían mucho en sus niveles de motivación para hacer sus tareas escolares. Para algunos, es relativamente fácil enfocarse y hacer su tarea, mientras que para otros, igual de inteligentes, les resulta hasta angustioso abrir sus libros de texto. Algunos niños disfrutan los desafíos mientras que otros hacen lo que sea para encontrar una salida fácil.

Los niños brillantes con bajo rendimiento escolar son a menudo llamados “perezosos” o “desmotivados”. Sin embargo, el niño realmente desmotivado no existe. En algún nivel, todos los niños quieren sentirse capaces, y hacer que los adultos importantes en su vida piensen bien de ellos. A ninguno le gusta fracasar, pero a veces otros factores se interponen en sus motivaciones para alcanzar un objetivo.



Los niños que no se sienten motivados para hacer trabajos escolares, suelen quejarse de que el trabajo es “aburrido”. Lamentablemente, “aburrido” es la palabra menos descriptiva en el vocabulario de un niño. Podría significar cualquier cosa, ya sea que el trabajo es demasiado difícil, o demasiado fácil; que el niño se siente asustado, enojado, impotente, incapaz o desconectado; que no sabe cómo hacer el trabajo, o que no entiende por qué es necesario. Puede reflejar miedo al fracaso, al éxito o al esfuerzo.

Los padres que acuden a nosotros preocupados por la falta de motivación de sus hijos, a menudo se sienten frustrados, inútiles y asustados. Ya han intentado razonar, advertir, amenazar, sobornar y persuadir con mimos a sus hijos, pero nada parece hacerles entender. La mala noticia es que no hay soluciones rápidas para los problemas de motivación. La buena noticia es que comprender con exactitud la razón por la cual tu hijo está atascado en esa situación, contribuye a sugerir formas para avanzar. En este capítulo daremos una mirada profunda a la motivación, y describiremos estrategias de crianza para ayudar a que los niños encuentren sus pasiones, cultiven perseverancia y conviertan la motivación en acción.

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