Como ciudadanos del común, es corriente ver que proferimos la siguiente queja acerca de nuestros líderes políticos: “es que todos son una partida de corruptos y por eso es que este país está como está”. Se podría afirmar que ese es casi que un universal del pensamiento. Muy distintas personas en muy diversos países del mundo piensan de ese modo.

La pregunta es ¿qué hace usted para que su país sea un lugar más honesto? ¿Qué hace usted para que su trabajo sea transparente para usted y para los demás?El mundo de los negocios es dado a las transacciones “fáciles”, de grandes y “fáciles beneficios” para todos. Sin embargo, resulta muy importante considerar la siguiente idea: ¿Vale la pena, una enorme ganancia versus el precio de comprometer su imagen, quizás de por vida?

¿Espera valores, entereza y corrección de los demás? Sencillo, sea usted el ejemplo. Y si es dueño de una empresa o de un negocio con mayor razón. Todo lo que haga tendrá un efecto a largo plazo. Suponga que por incrementar el margen de ganancia en sus ventas reduce la calidad de la materia prima de su producto. En un principio puede sonar muy bien y mientras la gente percibe el cambio no va a ocurrir “nada”. A largo plazo, perderá un sinnúmero de clientes, lo cual no es para nada beneficioso.

Aquellos productos que han acompañado nuestras vidas durante épocas, están allí, porque sus han sido leales con sus clientes la mantener la calidad. Aquellas empresas en las que creemos permanecen en nuestra fe, porque hemos podido observar con el transcurso de los tiempos que son fieles a lo que ofrecen. Admiramos de este tipo de entidades su virtud, su seriedad y su responsabilidad. Generalmente tras de ellas, están líderes serios y responsables que considera que un negocio se debe manejar con rectitud.

El liderazgo transparente es una actitud de compromiso con unos principios y valores. Resulta muy difícil exigir estos valores y principios en los demás si usted no los muestra. Las empresas se parecen a sus líderes. No olvide esto nunca. Usted quiere para usted y sus empleados lo mejor. Tome opciones claras. Considere sus decisiones, visualizándolas en el futuro. Imagine las consecuencias de una mala decisión, que involucre la falta de claridad y piense en el impacto que traería la falta de transparencia para su vida y para su negocio.